España vive impactada por el ataque yihadista que tuvo lugar este miércoles en Algeciras. Un individuo irrumpió en una iglesia de la localidad andaluza con una catana en la mano. Propinó un golpe mortal al sacristán, Diego Valencia, e hirió a tres personas más, entre ellas el vicario parroquial del cercano templo de San Isidro, el sacerdote salesiano Antonio Rodríguez, de 74 años, que fue agredido minutos antes y trasladado posteriormente al hospital Punta de Europa. Un ataque que ya ha sido condenado por los cargos públicos del país.
Según explica El Diario de Andalucía, testigos presenciales señalan que el detenido entró en la iglesia de San Isidro gritando “por Alá” y amenazando a los fieles. Tres mujeres lograron huir y en una peluquería cercana avisaron a la policía. Tras herir al sacerdote salesiano que cuida la iglesia, se dirigió a la iglesia de La Palma, donde tiró unos cirios y crucifijos pequeños. A continuación, pasó al patio del templo, donde los hermanos de la cofradía estaban limpiando el paso del Nazareno. El sacristán, que se enfrentó a él y fue atacado por el agresor, logró salir de la iglesia pero fue alcanzado por el atacante en el exterior, dónde le causó heridas mortales.
Así han reaccionado diferentes hermandades de Dos Hermanas a este hecho.