La escuela de verano «Fiesta en Verano 2014» puso punto y final en la mañana de hoy, 4 de septiembre, a tres meses de trabajo y educación en niños con algún tipo de discapacidad.
Alrededor de 15 niños de media diaria, desde los 6 a los 25 año de edad, han tenido durante este curso que comenzó el pasado mes de junio la oportunidad de no frenar sus avances durante el resto del año y seguir progresando para hacerles la vida más fácil, y es por ello por lo que «estamos en la obligación de hacer esta escuela de verano, por los padres y sobre todo por los niños» ha explicado la delegada de Asuntos sociales, Lourdes López.
Para las monitoras ha sido «un año muy emotivo, porque es un trabajo que desde fuera se ve muy duro pero cuando estás dentro es muy gratificante y te llena como persona». Además los niños, cuenta una de las monitoras, «no se quieren ir a la playa con los padres y tenemos que «mentirles» con que cerramos o algo para que se vayan».
Entre las actividades que realizan están los juegos manuales, los bailes, colorear y aprovechar el entorno del Parque de la Alquería para estar en contacto con la naturaleza, aunque «no podemos planificar las actividades con antelación porque depende de cómo estén los niños cada mañana, ya que son muy emocionales».
La próxima edición de estas escuelas serán en las vacaciones de Navidad para que los padres puedan conciliar la vida laboral con los cuidados especiales de sus hijos sin ningún tipo de problema.