La oposición para optar a una plaza de Guardia Civil, es una de las más demandadas en la actualidad.
El número de aspirantes que anualmente se enfrenta a las pruebas para ser Guardia Civil es cada vez más elevado. El proceso es largo, pero efectivo y empieza con la inscripción en una academia de prestigio como administraciondejusticia.com/oposiciones-guardia-civil. A partir de aquí, toca centrarse y preparar a conciencia las diferentes pruebas establecidas, que para este 2021 presentan algunas novedades.
Cambios a tener en cuenta para la convocatoria de Guardia Civil 2021
El número de plazas se mantiene estable con respecto a años anteriores, por encima de las dos mil, 2.091 para ser exactos. No obstante, solo la mitad se ofertarán mediante acceso libre. Casi un cuarenta por ciento se reservan a los militares que llevan más de cinco años en el ejército y la cifra restante, está destinada a los alumnos del Colegio de Guardias Jóvenes.
La fecha se adelanta un mes, ya que las primeras pruebas tendrán lugar a finales de septiembre.
En cuanto a los requisitos fundamentales para poder presentarse a la prueba destacan la edad máxima de los opositores que no debe sobrepasar de 40 años en 2021 y poseer el título de la ESO (Educación Secundaria Obligatoria). Otras condiciones son la ausencia de delitos penales o de estar inmerso en un proceso judicial por delito doloso, así como no tener tatuajes ofensivos ni haber sido inhabilitado de la administración pública; entre otras exigencias.
Pruebas teóricas
La ortografía sigue siendo eliminatoria. Es decir, quien no supere este ejercicio queda excluido de la selección. Ocurre lo mismo con el examen de inglés, que requiere acertar 8 de las 20 preguntas para poder seguir participando en el proceso. La prueba de conocimientos se mantiene con 100 preguntas e incluye diferentes temas como Derechos Humanos, igualdad, riesgos laborales, extranjería e inmigración, entre otros. Éste es el examen más largo y costoso, ya que supone una hora y media de desarrollo. Las pruebas teóricas se completan con un examen psicotécnico que analiza las aptitudes intelectuales y el perfil personal del aspirante.
Resistencia física y entrevista personal
La segunda parte del examen corresponde a las pruebas físicas, a las que accederán los opositores que haya superado la fase teóricas. Sesenta metros de velocidad, resistencia muscular con dos kilómetros de distancia sobre pista, fuerza de brazos a través de las flexiones y 50 metros de natación completan este apartado.
La diferencia de género se mantiene en esta prueba, ya que habrá ciertas diferencias entre los ejercicios exigidos al género masculino y al femenino. La novedad aquí reside en los baremos de calificación, ya que se establecen en torno a las franjas de edad, diferenciando a los mayores de 35 y 40 años.
La entrevista personal es el penúltimo paso y éste requiere de una preparación especial. Psicólogos y guardias civiles analizan el estado anímico y personal del opositor, que debe tener destreza para responder de acuerdo con los criterios exigidos. Por último, los aspirantes que superen esta prueba tendrán que pasar un reconocimiento médico y si son considerados aptos, habrán logrado s plaza de Guardia Civil.