La Virgen de Valme fue coronada el 23 de junio de 1973 en la Plaza del Arenal. Una coronación que fue el culmen de un proceso que comenzó en 1942 cuando se planteó por primera vez coronar a la Protectora de los Nazarenos. Dentro de este proceso, el período que cubre desde 1952 al 1954 es en el que se intenta con mayor ímpetu, sin llegar a culminarse.
Más adelante, en 1964 con la entrada de Antonio Muñoz Rivero como alcalde de Dos Hermanas, la devoción de la Virgen de Valme va en auge. Todo ello dado que en 1965 es nombrada como Patrona del Excelentísimo Ayuntamiento de Dos Hermanas. Un año después, recibe la donación de unas coronas para la Virgen y en 1970 se realiza su monumento.
Por ello, en 1970 comienzan los trámites para coronar a la Virgen de Valme. El Cardenal Bueno Monreal dio su apoyo desde un primer momento a la coronación. El 26 de julio de 1971 se firmó y remitió al arzobispado el expediente de la Coronación de la Virgen de Valme, siendo enviado a la Santa Sede el 8 de septiembre de ese mismo año.
Todo se preparó con el mayor cariño de Dos Hermanas. El pueblo nazareno se volcó para un hecho histórico que aún se guarda en las retinas de muchos de ellos. Un acontecimiento que tuvo eco no solo a nivel local, sino también nacional. Los últimos trámites fueron fijar la fecha del 23 de junio y nombrar a los padrinos de tal magno acontecimiento. Carrero Blanco y su esposa fueron los elegidos.

La preparación de la Coronación culminó con una peregrinación a la Ermita de Cuarto, un triduo pontifical y el pregón.
Una coronación histórica
El 23 de junio de 1973 se dieron cita en Dos Hermanas autoridades políticas de toda España. La hermandad de Valme invitó al acto a los príncipes Don Juan Carlos y Doña Sofía, que ante la negativa de su asistencia, ofreció al padrinazgo al almirante Carrero Blanco y a su esposa Carmen Pichot. Tras pasar por la parroquia de Santa María Magdalena donde se les impuso la medalla de oro de la hermandad, se trasladaron hasta la Plaza del Arenal.

A las 19.45 horas salió la Virgen de Valme hacia la Plaza del Arenal para su coronación. El Cardenal Bueno Monreal ofició el Pontifical donde se bendijeron las coronas. Posteriormente el hermano mayor, Manuel Moreno; el párroco, José María Ballesteros; y el cardenal Bueno Monreal subieron al paso para proceder a la coronación. La hermandad señala en su crónica, que primero se le impuso a la Virgen y posteriormente al niño, al contrario de lo que marca el ritual litúrgico.
Tras el Pontifical, recorrió las calles de Dos Hermanas en un día histórico para la ciudad.
Las fotografías han sido facilitadas por la Hermandad de Valme.







