La Huelga de los trabajadores de Correos iniciada el pasado jueves, 26 de febrero, está siendo secundada por el 100% de los carteros de Montequinto y hoy, 2 de marzo, en su tercer día han vuelto a recorrer las calles de Montequinto denunciando y protestando por el mal servicio postal y la intención de Correos de eliminar tres puestos de trabajo en esta Unidad de Reparto. Varios colectivos sociales, como el 15M y la Plataforma por la Mejora de Montequinto, y el sindicato CGT, estan apoyando y participando en las manifestaciones.
La acumulación y los retrasos en el reparto de la correspondencia va creciendo y a los miles de objetos postales anteriormente acumulados se van añadiendo los no repartidos por los efectos de estos paros. La Dirección de Correos es «insensible», según los trabajadores, a esta grave situación de la calidad del servicio postal en el barrio y ni siquiera se ha puesto en contacto con los huelguistas para intentar resolver los problemas que generan estos paros, mostrando así un «desprecio hacia los carteros y sobre todo al derecho de los ciudadanos de recibir diariamente su correspondencia».
Se esta intensificando la campaña para que los vecinos reclamen y exijan el reparto diario de la correspondencia, y son ya decenas de vecinos los que se están acercando por la Oficina a presentar sus reclamaciones.
El objetivo de esta Huelga es evitar la eliminación de secciones de reparto, hay que ampliar la plantilla, pues el barrio está creciendo urbanísticamente (800 nuevas viviendas de reciente construcción), y conseguir la cobertura de todas las vacantes (secciones no cubiertas, asuntos propios, bajas por enfermedad) mediante contratación de personal laboral de las listas de contratación, para garantizar un buen Correo Público y de calidad, exigiendo el cumplimiento de la ley 43/2010 del Servicio Postal Universal que obliga a Correos al reparto diario de la correspondencia
Este brutal recorte de plantilla, llega en un momento de mal servicio postal que se está dando en el barrio, provocado por la decisión de la Dirección de Zona, de no cubrir las secciones vacantes (en la actualidad 2) y no sustituir a todos los trabajadores que están de baja por enfermedad, y cuyas consecuencias son la mala calidad del servicio, el incumplimiento de la Ley Postal (que exige el reparto diario de la correspondencia), el deterioro y la mala imagen del Correo público y las malas condiciones del trabajo que soportamos los trabajadores de la Unidad de reparto, pues la sobrecarga de trabajo es inasumible y origina estrés, agobio e impotencia, y afecta a nuestra salud laboral. La eliminación de los tres puestos de trabajo deteriorará aún más el servicio postal.