El alumnado del 2º ciclo de Educación Primaria del Colegio San Hermenegildo culmina su proyecto de aprendizaje y servicio “Pantalla Hazul” en colaboración con el Hospital Infantil Virgen del Rocío y la Asociación El Gancho Infantil.
Cuando el curso pasado comenzaron a proyectar esta actividad de este primer trimestre, se abrieron multiples posibilidades. Sin embargo el coronavirus fue cerrando puertas pero dejo abierta la “más grande”.
Tras una conversación con Marta Baturone, presidenta de la Asociación El Gancho Infantil con la que ya colaboró este centro en el proyecto “Youtubers de Corazón” para hacer una importante aportación para la Azotea Azul, tuvieron claro que conseguir una pantalla digital para la escuela del Hospital Infantil Virgen del Rocío era un objetivo precioso para este curso. Paco, el profe de la escuela, puso todo su entusiasmo desde el primer momento.
“Cuando se lo contamos a nuestros alumnos, las sonrisas traspasaban las mascarillas, y es que la huella que dejarían en la sociedad, sería eterna. Comenzamos por una actividad de motivación muy divertida, que dio lugar al diseño de la chapa. Más de 4.500 chapas salieron de nuestras clases en solo un mes, la ilusión y la energía que han transmitido ha servido para iluminar el camino de un trimestre complicado por todas las circunstancias que nos rodean”, según los propios profesores del centro.
No obstante la sorpresa fue mayor cuando en tan solo un mes consiguieron 11.795,50 euros, con el que han comprador un panel interactivo de 75 pulgadas para los niños ingresados y que reciben sus clases en el aula del Hospital Infantil Virgen del Rocío. Además han sumado tres tablets de 13”, una demanda que tenían hace tiempo para poder usarlas con los niños que no podrán desplazarse al aula, y que tendrán este medio tecnológico en su habitación. Así mismo, con todo el dinero restante, colaboraron en el proyecto “Tu casa Azul”. Un proyecto inmenso, que pretende construir una casa con la colaboración de la Fundación Ronald McDonald, para aquellas familias que necesitan acompañar a sus hijos durante largos períodos de tiempo de ingreso, y que no tienen los medios suficientes para pagar un alquiler cerca del hospital.