El Ayuntamiento de Dos Hermanas aprobó este viernes, 28 de abril, una moción conjunta de todos los grupos políticos y concejalas no adscritas sobre el derecho a petición con relación a la creación de una Ley de regularización de la profesión de Educación Social, dirigida al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Trascurrida una década, el Gobierno incumpliendo por dilación este mandato legal, aún no ha aprobado los Estatutos definitivos del Consejo y con ello ha dejado al máximo órgano de representación de la profesión de educación social en un limbo legal, privando con ello el ejercicio legítimo de los Colegios Profesionales de Educadores Sociales de agruparse en torno a una corporación de derecho público de ámbito estatal que represente a todos los profesionales de este sector.
Atrás quedaron años de esfuerzos por conseguir la aprobación definitiva de los estatutos; así por las distintas directivas por mandato asambleario, se intentó hasta el hartazgo el impulso de este trámite establecido en la disposición transitoria segunda, a estos efectos se han realizado multitud de negociaciones con la administración, además de incontables modificaciones estatutarias, matices de estilo, contenido, incompatibilidades con legislaciones autonómicas, etc. Pese a ello, tras todo este esfuerzo, se ha llegado al punto inicial, los estatutos, según el informe elaborado por el Consejo de Estado y por resolución de la Secretaría General Técnica, no serán aprobados en los términos manifestados en la Asamblea del Consejo, sino que los mismos sufrirán una «previsible» e importante reducción reguladora y con ello de competencias, entre las que destaca la pérdida de la exclusiva representación institucional y corporativa, la pérdida de la potestad disciplinaria y deontológica, y la consideración estatutaria de la colegiación como voluntaria, que lleva, en palabras del propio Consejo de Estado, a considerar el Consejo como una asociación privada.
Ante esta situación se abre un escenario nada halagüeño, a la vuelta de la esquina el Ministerio, previsiblemente, procederá a elevar al Consejo de Ministros (para su posterior aprobación y publicación en el BOE), su «texto refundido de estatutos», previa purga del articulado de aquellos elementos regulatorios considerados fuera de la competencia de este Consejo.
El Tribunal Constitucional deja así establecida su jurisprudencia en la materia, diferenciando entre Colegios de adscripción obligatoria, a los que corresponde el ejercicio de funciones públicas – ordenación de la profesión y control deontológico- encomendadas por el legislador y las Administraciones competentes, y los Colegios de adscripción voluntaria, que en principio no pueden ejercer funciones de ordenación de la profesión, incluida la potestad disciplinaria».
Ante este contundente Dictamen (que aunque no es vinculante si indica con claridad cuál será la hoja de ruta del Gobierno en la aprobación de los Estatutos del Consejo) desde la corporación nazarena como respuesta la activación del mecanismo constitucional del derecho de petición por tres razones:
- Utilizar esta vía legal (Constitucionalmente establecida) por ser la única que les permitirá trasladar (con absoluta independencia) al Gobierno la demanda ciudadana y por ende profesional de la necesidad de la aprobación de una Ley que regule la profesión y que refuerce con ello el papel del Consejo y de los Colegios, así como que regule y justifique la Colegiación Obligatoria en base a la importancia y función estratégica de la educación social.
- La visibilización, dignificación y reivindicación de la importancia para la sociedad de esta profesión.
- La estabilidad que una Ley marco aportaría al ejercicio de esta profesión, la consolidación no solo en el ámbito de sus Órganos de Gobierno sino que además tendría efectos positivos en la normativa laboral y de función pública así como en su implantación real.
Por ello, diez años después, este colectivo pide la discusión, elaboración y aprobación de una Ley para garantizar el ejercicio de la ciudadanía de este derecho tan olvidado como es la Educación Social.